domingo, 2 de enero de 2011

Dias 9 y 10

5-7-10

Dia 9

Orjais (Portugal)- Zafra (Badajoz)

Pase una noche malisima por culpa del calor. Me levanto y doy un ultimo paseo por Orjais. Seguidamente arranco y voy de cabeza a Covilha. Echo caldo y aprovecho para desayunar en la tienda de la gasolinera, no soy el unico hay varios clientes desayunando y aunque parezca raro a estas horas algunos estan tomando cerveza. Hablo con un par de ellos referente a la moto y esas cosas.
Arranco por la autovia en direccion a Castelo Branco y un rato despues la dejo a la altura de Nisa y hago una parada en Alpalhao, donde estiro un poco las piernas y compro pilas para la camara.
No es la primera vez que visito esta zona de Portugal, he de reconocer la comarca del Alentexo me gusta bastante, la gente es buena y la comida ni te cuento, podriamos decir que es la Extremadura portuguesa. El paisaje cambia del verde al amarillo y abundan las encinas que dan de comer a los cerdos.








Vista de Portalegre







Cojo rumbo a Portalegre capital de la comarca del Alentexo y ciudad que conozco muy bien. No me molesto en entrar y sigo direccion Arronches por una carretera comarcal, es una gozada rodar por ella porque tiene unas vistas preciosas. Paso el pantado Do Caia y me presento en la monumental ciudad romana de Elvas a tan solo 10 o 12 Km de Badajoz. Elvas es parada obligada, ademas me viene de lujo para comer. Lo primero que impresiona cuando vas llegando a la ciudad es el enorme Acueducto de Amoreira, también conocido simplemente como el Acueducto de Elvas, esta es posiblemente una de las construcciones más impresionantes que se puede ver en esta ciudad, debido tanto a su tamaño como a su antigüedad y lo mas curioso de todo es que todavia esta en uso.







El pedazo de acueducto de Elvas






Subo a la monumental plaza de la Republica, sin duda el centro neuralgico de la ciudad. Hace un calor terrible, hay algunos gitanos vendiendo antiguedades, pego un repaso pero no me interesa nada. Tomo algunas fotos y pregunto un lugar para comer bien y que no sea un sitio turistico, en general me gusta mas donde van los clientes locales. Me indican una casa de comidas, situada en una pequeña calle cerca de la plaza. El sitio me gusta, es pequeño y esta decorado con todo tipo de cachibaches antiguos. Pido una sopa y la especialidad de la casa, el cochinillo asado. Despues de comer me pego una tumbada en el suelo, en un gran portal al lado de donde tengo aparcada a la Anselma, me quedo dormido al instante, fue una pequeña gran siesta muy placentera, el punto gracioso fue que el portal era de un banco y clientes y empleados pasaban por mi lado mientras dormitaba.







Plaza de la Republica en Elvas






Ya mas espabilado cojo la moto y subo a la zona alta del pueblo donde esta el castillo. Han debido de hacer estos dias atras algunas jornadas romanas porque en la explanada del castillo todavia quedan casetas y restos de fiesta. Elvas es un sitio de obligada visita para los amantes de la epoca romana y la antiguedad en general. Todas las calles de estan empedradas, no es bueno para la moto. Noto un ruido extraño en la parte delantera y me doy cuenta que una de las defensas se ha partido por las vibraciones que provocan el empedrado. Vaya mierda de defensas, las compre solo hace dos o tres meses, son marca Spaam, no se las recomiendo a nadie, imagino que tendran defecto, por que si se parten solas imaginaos si hay una caida y tienen que aguantar todo la fuerza y el peso de la moto, no quiero ni pensarlo.







Tipico paisaje extremeño






Continuo mi camino en direccion Badajoz ciudad que solo esta a 11 o 12 Km de Elvas. Justo en la salida de esta hay una rotonda con una fuente enmedio, el calor es asfixiante. Paro la moto y me meto en la fuente sin quitarme la ropa. Por lo menos llegue fresquito a Badajoz. Nada mas llegar fui a una gasolinera, donde me volvi a duchar vestido. El termometro marcaba 42 grados. Cruzo Badajoz y enfilo por la N-432 en direccion a Cordoba-Sevilla. Paso por La Albuera, Santa Marta y desde la carretera diviso en un cerro el pintoresco municipio de Feria. Decido quedarme en Zafra, una de las perlas de Extremadura. Me instalo en el hostal Arias, situado al lado de la carretera. Fue todo un acierto, buena habitacion, limpio, aire acondicionado y nada caro. Son las seis de la tarde y hace un calor horroroso, asique aguanto un rato en la habitacion con el fresquito del aire acondicionado.







Rincon en la Plaza Grande, en Zafra








Un buen rato despues me lanzo a la calle y doy un paseo por el centro historico, las calles estan impecables, hay iglesias, conventos y monumentos a saco. Me encanta esta pequeña ciudad, ademas el ambiente es muy bueno, hay muchos bares y amplias terrazas, eso si, el calor no para. En una zona peatonal donde se agolpan un mogollon de tientas, tienen instalados un sistema de refrigeracion a base de agua difuminada, se crea un microclima y la temperatura baja varios grados. Tomo un par de cervezas y compro algo de comida para llevar, me la zampo sentado en un banco de unos jardincillos frente al imponente Castillo situado en el centro de la poblacion donde hoy en dia se alberga el parador nacional de turismo.
Ya en la habitacion estudio la ruta para mañana, mi destino es el Puerto de Santa Maria, donde pienso alojarme en casa de mi primo, el tio se queda flipao cuando por telefono le anuncio mi llegada para la hora de comer.



6-7-10

DIA 10

Zafra (Badajoz)- El Puerto de Sta Maria (Cadiz)

Zafra es uno de los puntos fuertes de la ruta jacobea conocida como La Via de la Plata a su paso por Extremadura, por tanto me levanto temprano y para hacer un poco de ejercicio mañanero y recordando mis tiempos de peregrino sigo a pie las flechas del camino durante un buen rato. Deshago lo andado, regreso al hotel y tomo una buena ducha, acto seguido pego un potente desayuno en el restaurante del hotel y cojo marcha por la N-630 en direccion a Sevilla. Son las 9.30 de la mañana y ya pega un calor que no veas. El paisaje no puede ser mas extremeño olivos y bosques de encinas que serviran para alimentar de bellotas a los preciados cerdos ibericos. La carretera coincide en algunos tramos con la Via de la Plata y me cruzo con algunos peregrinos en bicicleta.







Mas paisajes






Paso por Fuente de Cantos y unos kilometros mas adelante me detengo en Monesterio con idea de buscar una fuente. El agua se me olvida rapidamente cuando me veo rodeado de fabricas y tiendas de jamones y todo tipo de embutidos ibericos.
Entro en una de ellas y por solo 30 pavos compro un generoso surtido de todo lo que te imagines relacionado con el mundo del gorrino iberico. Sigo mi camino en direccion a Sevilla, a pesar que hay tambien autovia prefiero seguir por la N-630, de todos modos a la altura de El Ronquillo dejo la nacional y me meto en la autovia para no tener lio en Sevilla, aunque siempre hay lio en Sevilla ya que hay muchas carreteras y autovias que se cruzan y no es raro meter la pata, ademas si no estas al loro es muy facil meterse de cabeza en la autopista de peaje que va a Cadiz a la altura de Dos Hermanas (cuatro tetas).








Momentos antes de circunvalar Sevilla






En Dos Hermanas dejo la N-630 y cojo la nacional IV direccion Cadiz. Un poquito mas adelante de Los Palacios, justamente en Torviscal me desvio por la comarcal 441 paso por Las Cabezas de San Juan y por la monumental Lebrija y en Trabujena cojo una carretera local a Jerez y alli agarro la autovia A-4 derechita al Puerto.






Dos simbolos inequivocos de estos lares





A pesar de que para llegar a casa de mi primo hay que cruzar todo el Puerto, llego sin ningun problema. El tipo no esta en casa, ha salido con su pareja a comprar, me toca esperarlos. Cuando llegan nos actualizamos mutuamente, ya que hace tiempo que no nos vemos y acto seguido comenzamos una peregrinacion inacabable por los bares y tabernas del Puerto hasta que nos fuimos a dormir por la noche. Es algo bastante tipico aqui salir a tomar tapas y vinos, ademas si vas con alguien que conoce bien el terreno flipas porque otra cosa no lo se pero bares tipicos y autenticos hay a saco, he de resaltar que lo mejor no son los bares sino el ambiente tan bueno que se forma, en fin totalmente recomendable, saludable e impepinable. Mejor nos vemos mañana que con tanta cervecita y otras hierbas la pista no esta pa chotis je je je.








En el Parque Calderon en el Puerto.

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