30-10
Gaciantep-Antioquia
Salgo del hotel mas o menos a las 9 de la mañana, es domingo y todavia no hay mucho ajetreo por la calle. Antes de ir cojer el bus a la otogar voy a pegar un increible desayuno a base de batido de frutas en una especie de minibar-zumeria-centro-vitaminico, en la misma calle del hotel, ayer me llamo mucho la atencion el lugar, todavia hube de esperar un poco a que el tio abriese, por cierto el dueño es un tio increible, ha viajado a Cuba y a Colombia, hace verdaderas virguerias con las frutas, dignas de la maxima admiracion. Acto seguido paso por un cajero de uno de los bancos de la calle, llevo en metalico 50 EU y 58 TL, aunque tengo mas que suficiente para dos dias voy a hacer una prueba, hasta ahora he ido gastando lo que llevaba en metalico y tambien he pagado algunas cosas con la tarjeta. Me sorprende bastante el hecho de que el cajero no acepte mi tarjeta visa, pruebo en otro y la rechaza tambien, me mosqueo un poco pero no le termino de dar la importancia que merece, ya probare mañana en Hatay que sera lunes y se podra hablar con algun empleado del banco en caso de que tampoco la acepte.
Las pequeñas maravillas del tio de la zumeria
Mi intencion es viajar a la ciudad de Hatay ubicada todavia mas al sur y a escasos Km de la frontera con Siria, el bus esta a puntito de salir con lo cual me viene de lujo, compro mi ticket por 17 TL.
Hatay es el nombre actual de la ciudad de Antakya, que no es otra que la antiquisima y biblica Antioquia, capital floreciente de la antigua Siria, ciudad superhistorica y clave para la religion cristiana, aqui se refugio San Pedro y los amiguetes despues de la muerte de Jesus y aqui precisamente fue donde San Pedro erigio la primera iglesia en una gruta cercana a la ciudad actual. Eso no les molaba nada a los romanos que eran los que dominaban Antioquia en aquel entonces. De aquellos años practicamente no queda nada, la antigua Antioquia esta sepultada varios metros del Hatay actual.
La actual ciudad de Hatay, la antigua Antakya y la antiquisima Antioquia.
Antakya, que es como me referire siempre a la ciudad para que no haya lio, es bastante grande y tiene dos estaciones de otogar, la grande que esta a las afueras y otra mas pequeña dentro de la city, por suerte el bus me deja en la pequeña. Una chica a la cual solo se le ve la cara me explica en ingles la direccion hacia el centro. De camino pruebo a meter la tarjeta a un cajero y no hay nada que hacer, la escupe descaradamente. Ahora ya si empiezo a mosquearme y decido economizar pasta durante el dia de hoy y mañana lunes ya veremos que pasa. El centro de Antakia, se puede situar a ambos lados del rio Asi, que atraviesa por completo la ciudad, justo en el puente que une la ciudad nueva al oeste y la ciudad vieja al este, en la orilla de la parte nueva esta el museo arqueologico y la mayoria de los hoteles importantes, mientras que en la vieja hay unas calles comerciales muy animadas, estan tambien los restaurantes y el antiguo bazar, por cierto es una pena pero el rio Asi bien podriamos denominarlo como una enorme cloaca al aire libre. Cojo habitacion por 15 TL en el tenebroso hotel Yesilova, tuve que quedarme ahi por la cosa del ahorro, fue la habitacion mas barata que consegui durante este viaje y tambien el hotel mas cutre que he estado en mi vida y mira que puedo presumir de haber frecuentado bastantes hoteles y pensiones cutres. Describire el hotel mas adelante, como anticipo dire que no tiene desperdicio, o mejor dicho, no tiene nada aprovechable. La unica ventaja que posee es que esta pegado al bazar y en la zona mas animada de la ciudad.
Ambiente en el bazar
Doy una pequeña vuelta para tener un primer contacto con la ciudad y acto seguido voy de cabeza a una calle al otro lado del rio donde hay pequeñas sucursales de las compañias de buses. Mi siguiente destino es otra ciudad muy espiritual, Konya centro de la antigua secta religiosa de los derviches danzantes. Mi autobus saldra de Antakya a la 11 de la noche y llegara a Konya sobre las 7 de la mañana, con lo cual todavia tengo lo que resta de hoy y todo el dia de mañana para disfrutar de Antakya. El precio del billete fueron 45 TL. Ya con el billete en el bolsillo dirijo mis pasos al museo arqueologico (Hatay muzesi) donde se pueden admirar los increibles mosaicos asi como muchas piezas originales de la antigua Daphe, situada a 10 Km de Antakia. En la misma puerta del museo hay una unidad movil solidaria de donaciones de sangre para las victimas del terremoto de Van, me encantaria donar sangre pero desgraciadamente no puedo ya que mi siguiente visita es a un hamman (baño turco), uno de debilita mucho al dar sangre y en hamman ya de por si te quedas hecho polvo y no quiero arriesgarme a que me de un bajon de tension o algo asi, ademas ya hice mis pequeñas donaciones a Van en Sanli Urfa.
En una de las salas del museo
El hamman Meydan es toda una institucion en Antakia, es super antiguo, la estructura original data de los tiempos de los romanos y es regentado desde hace 200 años por la misma familia. Hablo durante un rato con el dueño que me explica muy orgulloso la historia de su hamman y las restauraciones pertinentes que hizo su bisabuelo y que se mantienen hasta ahora. En el caso de este hamman solo se admiten hombres, que van no solo a gozar del baño sino que tambien pasan alli la tarde charlando. El sitio es superlimpio y ordenado, el ambiente es bueno y me gusta al instante. Primero entras a una gran sala cuadrada, donde hay unos departamentos individuales para que los clientes dejen su ropa y se relajen, la sala la corona una gran cupula, en el centro hay un antiguo pozo y unas neveras con botellas de agua, tambien venden refrescos y te. La sala esta amenizada con musiquilla muy relajante tradicional turca. Alli mismo la peña se desviste y te pones una toallita a modo de bañador. Pasas despues a la sauna, parece que entras directamente a un plato de una peli de romanos, hay marmol por todas partes y dibujitos de flores y plantas. Para pasar un poco de calor te sientas o tumbas en unas enormes y bien calientes losas de marmol, en la sauna hay varios hombres charlando que se sorprenden al verme, uno de ellos habla ingles y enseguida empieza a hacerme todo tipo de preguntas, ha traido por primera vez a su hijo de 6 años, que esta totalmente encantado y maravillado en ese sitio. Despues de sudar como un cerdo y quedarme practicamente sin fuerza, uno de los currantes del hamman me llama a otra sala donde me hace tumbarme y se pone un guante de crin y empieza a restregarme con cojones por todo el cuerpo, el tio tiene una maestria que no veas y me saca mierda por un tubo, sin jabon ni nada, totalmente a pelo y frotandome con tanta fuerza que me hace hasta daño, el se rie cantidad y no deja de hablarme en turco, le entiendo parte de lo que dice porque acompaña su explicacion con mimica. Acto seguido viene otro tio y me lleva a otra sala donde me hace que me tumbe boca abajo y me pega un doloroso pero revigorizante masaje por todo el cuerpo, aunque mas que masaje parecia que me iba a desencajar todos los huesos. Ya solo me queda pegarme la ultra ducha con agua fria y caliente y con jabon natural. Un poco despues voy a la sala hall-vestuario donde me relajo durante casi una hora, la verdad es que se estaba super a gusto. El precio fueron 8 TL por la entrada mas 10 TL por el baño que me dio el tipo y el masaje mas 2 TL de propina en total 20 TL por una gran sesion de baño turco y en un hamman milenario, pasado a euros no llegan ni a 9. El hamman es un lugar diferente a cualquier otro, donde un simple baño que te das en tu casa, se convierte alli en algo muy placentero y te sientes como un maraja.
Entrada al hamman Meydan
Salgo de alli completamente relajado y derrotado, pero me siento muy bien, solo tengo fuerzas para comprar una lata de cerveza y sentarme en un banco mirando a la gente al pasar. Observo con curiosidad a la peña, a pesar de que estamos muy cerca de Siria y se supone que la religion es mas radical, no hay ni una chica tapada, muchas llevan un pañuelo a la cabeza pero la mayoria visten muy moderno, la influencia de occidente se nota a saco en la gente joven, no solo en la ropa, sino en el futbol, los moviles, gustos musicales y lo mas importante, en la actitud. Ya en la calle de las tiendas conozco por casualidad a un marroqui, el tio se alegra un huevo cuando le digo que soy español, hablamos durante un rato. Parece ser que fue marinero en un carguero español y conoce todos los puertos mediterraneos, ahora esta instalado en Antakia desde hace un año y le encanta la ciudad y el pais, en su ignorancia me sugiere que venga a vivir aqui. Ya dejando al marroqui, pego una sabrosa cena a base de cordero asado y un plato confeccionado con vegetales en un restaurante de esa misma calle.
Por la calle hay bastantes vendedores ambulantes de todo tipo de cosa, pero me llama la antencion unos tipos ataviados con trajes antiguos que llevan como unas gigantescas cafeteras de cobre que echan humo, venden una bebida llamada salep, se prepara en esa especie de cafetera ambulante, es una bebida lechosa que te la sirven con azucar moreno espolvoreada, se sirve casi hirviendo y es muy vigorizante y energetica, esta echa a base de raiz de orquidea y puedo decir que esta buenisima.
Aunque es un poco pronto decido ir a dormir, el baño me ha sentado de maravilla y aunque la cena me ha espabilado un poco, apetece cantidad ir a dormir.
En el interior del hamman, el tio de la derecha fue el que me dio el masaje.
El pequeño hotel Yesilova es una caña total, para empezar esta en una calle muy estrecha y mal iluminada lo que ya le da un aspecto un tanto lugubre, subes una escalera y apareces en una sala-recibidor-comedor donde hay tres o cuatro tios viendo la tele que me miran totalmente flipados, el dueño, que es de puta madre me saluda y me da la mano. El hotel no dispone de ducha, por tanto acerte en ir al hamman, el bater, que por supuesto es compartido, consiste en un agujero en el suelo y una manguera para tirarle agua, la puerta de la habitacion no dispone de cerradura sino que hay puesto un candado, la ventana no se puede abrir y por supuesto no hay cortina ni nada parecido, eso si, las sabanas de la cama estan muy limpias y huelen la mar de bien. Otro detalle es que el interruptor de la luz de la habitacion esta en el pasillo. Cuando me meto en la cama o mejor dicho en el catre, flipo en colores, parece que me he acostao encima de un camello, el colchon, de unos 120 años, tiene unos bultos que no veas. Me vuelvo a levantar para ver si lo puedo arreglar, debajo del mugriento colchon hay metidos un mogollon de cartones para equilibrar la cama, los saco de alli y como buenamente pude acomode un poco la cosa, aunque tuve que acostarme al reves para encontrar algo de comodidad.
Pantalones de "cagon" como yo les llamo
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