Kutna hora- Praha

27-10-08

El dia anterior la chica de la oficina de turismo me informo sobre los alrededores de Praga, asi que decidi , despues de considerar todas las opciones, hacer una excursion a una pequeña ciudad a 70 Km de Praha, se llama Kutna hora.
Bien tempranito me encamine hacia la estacion de tren Masrycovo Nadraz, esta cerquisima de mi hostel, asique no tuve que andar mucho, por cierto la parte antigua de la estacion es toda una obra de arte, aunque tuve tan mala pata que llegue con el tiempo justo y no pude comtemplarla como se merece, de todos modos alcance a ver la vieja sala de espera mientras la atravesava corriendo hacia los andenes. Praga por su situacion y su importancia en el pasado tiene cuatro estaciones de tren y segun a donde vayas o de donde vengas tienes que ir a una o a otra. Hicimos un transbordo a mitad de viaje y un rato despues me vi en Kutna hora.



En la estacion de Kutna hora



La estacion de tren no tenia nada que ver con la ostenticidad de la estacion de Praga, pero me gusta. La pequeña ciudad esta a dos Km asique dejandome llevar por los viajeros, cojo el autobus y me bajo cerca de una iglesia. Esta lloviendo, aunque no hay problema por que siempre llevo mi paraguas. La ciudad en si no es muy grande, pero se va extendiendo a lo largo de un bosque en pequeños nucleos de casas y casonas aisladas con amplios jardines, el conjuto tiene mucho encanto, en su tiempo fue la segunda ciudad de Bohemia e incluso competia con Praha en importancia, todo esta en plan antiguo, hay varias iglesias y una tranquilidad total. La estrella de esta pequeña ciudad es la catedral gotica de Santa Barbara.




Catedral de Santa Barbara



El ambiente es rollo pueblo, verdaderamente ya necesitaba algo asi, con tantas grandes ciudades a la espalda como llevaba, ademas, me viene de lujo despues del agobio de gente de Praga, aqui es todo lo contrario, no hay ni un turista ni medio, yo al fin y al cabo no soy turista, sino viajero. Aprovecho para comprar en una tienda unos pantalones militares de camuflaje, yo llevaba unos pero me los deje olvidados en el albergue de Krakovia. Buscando un sitio para comer, encuentro una casa de comidas para llevar, compro cerveza, una ensalada, unas costillas asadas y unas croquetas picantes de pollo, todo me sale por unos 7 euros. Me puse las botas en un parquecito al lado de una pequeña iglesia. Ese dia hizo frio y hubo lluvia intermitente durante todo el dia.



Calles



A pesar de que solo he pasado cuatro horas en Kutna-Hora, siento como si hubiese estado un dia entero por lo menos, cuando uno viaja solo los dias se hacen muy largos y parece que el tiempo se estire mas de la cuenta, pienso en cuando comenze en Paris hace trece dias, para mi es como si llevase viajando dos meses por lo menos.




La plaza mayor o algo asi



El viaje de vuelta a Praha fue matador, me equivoque de tren y fui a otro sitio, tuve que hacer tres transbordos para llegar a Praha, el ultimo tren en el que subi era muy confortable, ademas no habia casi nadie, se iba de lujo hasta que el revisor me echo de alli y me mando a segunda clase con el mogollon, no habia sitio y tuve que ir de pie. Una buena tecnica es hacerse el sueco e ir derechito a primera y esperar que te echen y si no lo hacen pues uno se queda alli disfrutando del viaje.







De nuevo en Praga y aunque ya habia anochecido di un ultimo paseo por el centro tomando unas fotos. Cruce el rio Moldava por el emblematico puente de San Carlos, es el puente mas bonito y mas antiguo de de Praga, esta decorado con un monton de estatuas, tiene tres torres, la que esta en el lado de la ciudad vieja esta considerada como una de las construcciones goticas mas importantes del mundo, aunque para mi lo mas bonito son las increibles vistas de la ciudad a un lado y al otro. El puente es peatonal, tiene medio Km de largo y diez metros de ancho, suelen ponerse musicos callejeros a tocar, a esas horas todavia quedaban algunos musicos de jazz tocando.
Al otro lado del puente se divisa en lo alto la ciudadela que alberga entre otras maravillas, el Castillo de Praga, es una de las construcciones mas importantes de la ciudad, en realidad es otra ciudad dentro de Praha y me he quedado sin visitarla, no me da pena, porque este viaje es asi, no hay tiempo para todo y lo que cuenta es el mismo viaje en si, las ciudades son siempre de paso.
Ya de nuevo en la fabulosa plaza Vieja, encuentro en una callejuela cercana a la plaza, mal iluminada y por la que no pasaba mucha gente a un abuelete tocando un instrumento rarisimo, el tio estaba sentado y sobre sus rodillas tenia el instrumento, era un cajon de madera, con una manivela en un lado para la mano izquierda y con la derecha el hombre pulsaba unas teclas a la vez que cantaba una melodia medieval en Checo. El sonido de ese chisme era una especie de chirrido, como cuando abres una puerta vieja, la afinacion no era la standar y sonaba bastante extraño, ademas el tio tenia un punto de desafinacion en la voz que te cautivaba. El instrumento en si era muy antiguo y tenia unos tallados muy bonitos, ademas el abuelo llevaba el pelo largo canoso, coronado con un gorrito, todo el que pasaba se quedaba escuchandolo.



El abuelete tocando su instrumento



Algo que me llamo mucho la atencion en Praha es la cantidad de garitos y antros relacionados con el sexo. Continuamente hay gente que te da invitaciones y tarjetas de puticlubs, en cualquier calle hay salas de despelote, discotecas y pubs liberados de intercambio de parejas y cosas asi, donde la gente se conoce y se lia sin ningun problema, por no hablar de los sex-shops que aparece uno por cualquier sitio, parecen supermercados, con carritos y todo.



El fabuloso puente de San Carlos



Hago otra visita a mi amigo el pintor turco del locutorio y regreso al hostel. Mis amigos americanos han vuelto a cocinar para todos, se ha unido gente nueva a su grupo y esta vez tienen cerveza y vodka a saco, mañana regresan a España y hoy celebran la despedida, recuerdo que estan estudiando Español en Barcelona, llevan una juerga del carajo, todo el mundo habla a la vez, es una borrachera colectiva, hace rato que han cenado, cargo mi plato con una especie de pure de patata picante y un huevo frito y me uno a ellos. Algunos se han comprado gorros de esos de piel con el pelo por fuera, los llevan puestos y es una risa. Uno de ellos me cuenta que le han puesto una multa de 50 euros por colarse en el metro, por cierto yo no pague ni un viaje de los que hice, en el metro de Praga no te controlan y no paga nadie y menos los extranjeros. Pero al pobre yanqui le ha tocao la china, un vigilante se le acerco y le pidio el ticket, suena un poco a encerrona, seguro le vieron la cara de buenazo, el resto de amigos, incluida la brasileña, tambien iban sin pagar y no les dijeron nada. En fin, el cachondeo continua, los americanos y toda la peña que se les ha unido, van salir un rato por ahi, me despido de ellos y les invito a que me visiten en España. Yo me voy a la cama, quiero estar en pie a las siete de la mañana, mi tren hacia mi proximo destino, que sera la capital de Austria, sale a las 8.23, y tengo que coger el metro hasta la estacion central Hlavni Nadrazi por lo tanto quiero ir sobrado de tiempo.
Antes de dormirme medito un poco sobre Praha, una ciudad vinculada al turismo que vive de su pasado monumental y de Kafka, al contrario de otras ciudades como Berlin por ejemplo o ciudades españolas como Barcelona o tambien Valencia, que apuestan por el futuro. Una ciudad bellisima y sin duda una de las mas bonitas de Europa e incluso del mundo, pero que a mi sinceramente, no me ha cautivado (debo de ser un bicho raro).