12-7-11
Aucum (Francia)-Rialp (Lleida)
En esta ocasion me desperte bien temprano con ilusion de disfrutar de un paseo de superlujo en un entorno paradisiaco como son estas montañas, pero nada de eso sucedio, me tuve que fastidiar, cuando me asomo al balcon descubro la inevitable niebla que inunda cada mañana el Pirineo, a lo que le sumas la jodedora lluvia fina, me vuelvo a la cama mosqueado y pongo la tele, en la cual los muy mamones del hotel no fueron capaces de incluir ni un canal español, hasta que me decido a salir al campo con lluvia y todo. Aun asi fue una pasada pasear durante hora y pico por uno de los PR que pasaban por alli y que se internaban en las montañas.
Vista tempranito desde mi habitacion, ni rastro de las montañas
Con un pequeño desayuno y una ducha me lanzo a la carretera con mi impermeable verde de tractorista que chocaba con los pedazos de trajes que llevaban unos alemanes con motos grandes que tambien estaban en el hotel. A unos 3 o 4 Km de Aucum me encuentro con la pequeña ciudad de Luz-St Sauveur donde debi quedarme ayer si lo llego a saber, en Sauveur tengo que pasar a traves de un mercado enorme donde hay una animacion que no veas, a ello hay que sumarle que la vuelta a Francia pasara por aqui en dos dias.
Ya casi arriba del Tourmalet
Sigo las indicaciones que me orientan hacia el puerto del Tourmalet, uno de los iconos principales de la vuelta a Francia. Ya ubicado en la D918 me lanzo de cabeza a subir el famoso puerto, la lluvia continua y conforme voy subiendo me acojono mas todavia y esque la niebla dificulta mucho la conduccion. Hay ciclistas franceses a saco a los cuales los fastidio un poco cuando los adelanto, voceandoles y haciendoles entender que Contador es el numero uno y cosas asi, a ellos los jode y me increpan con la mano, pero que vamos a hacer chicos, teneis que entenderlo de una vez, de todos modos reconozco que hay que tenerlos bien puestos pasa subir en bici. Voy parando a cada rato por que no se ve casi nada y soy consciente de que a mi derecha hay unos precipicios que te cagas, lo cual impone un monton. De repente y como por arte de magia surge un sol esplendido y las nubes quedan por abajo, es algo alucinante, solo se ve la parte alta de las montañas en un lecho de nubes, esta guapisimo, cuando llego a la cima del puerto me encuentro con un monton de ciclistas y multitud de autocaravanas que se apalancan para esperar al peloton de la vuelta, rapidamente me desvisto total y me entra una euforia y unas ganas de vivir increibles, la magnitud del lugar me contagia al instante.
Ahora si estoy arriba
Alli mismo hay un pequeño bar restaurante y una tienda de souvenirs, mucha gente viene al senderismo, hay infinidad de rutas aunque la mas cañera debe de ser la que corona el pico du Midi con 2832 m. Despues de empaparme durante un buen rato de tanta grandeza me lanzo hacia el descenso siguiendo la carretera D-918, paro a comer algo en La Mongie sentado en un banco frente a la iglesia y donde tienen expuesto bajo un techito un siniestro carruaje de muerto de 100 años por lo menos en plan conde Dracula y tal. Continuo hacia el siguiente puerto el Coll du Aspin, que aunque le sobra belleza, altura y curvas no tiene el poderio del Tourmalet, en Arreau cambio a la D-618 y como hoy es el dia de los puertos salgo de uno y voy de cabeza a otro el Coll du Peyresourde, la verdad es que aunque uno vaya en moto los puertos cansan bastante ya que al haber tanta curvita hay que estar muy concentrado por que a la minima la lias. Me presento en Bagneres de Luchon que es un poco la capitalilla de la zona y el ultimo pueblo de Francia antes de entrar en casa, alli paro un rato y me da tiempo a ver la iglesia y dar un garbeo por el centro.
Caravanas esperando la vuelta
Hay un atajo, en forma de carretera local que va directo a Les Bossots, ya en España, evitando asi la vuelta de mas de 40 Km que supondrian subir a St Beat y bajar de nuevo. Atravieso la antigua aduana y engancho con la N-230, aunque solo he rodado un dia y medio por la France, reconozco que me dio alegria entrar de nuevo a España y mas cuando uno se mete de cabeza en el impresionante valle de Aran.
Bagneres de Luchon
En Vielha paro a echar caldo y observo que el cielo se esta poniendo bastante oscuro, hay una tormenta justo en la direccion que me dirijo, hacia el Este por la carretera C-28. En Arties paro y dudo en cojer habitacion porque la lluvia va a ser inminente, al final paso de todo y tiro palante, ya veremos lo que pasa cara pasa. Me gustaria quedarme en Sort, todavia faltan unos 70 Km asique me lanzo a rodar y efectivamente empieza a llover aunque no demasiado asi que paso de parar a ponerme mi impermeable de tractorista. En un momento la lluvia se hace mas densa y ya la conduccion pasa a ser mas delicada y mas para mi que soy motero novato con solo algo mas de 20000 Km en mi haber. La verdad es que acojona un poco en ciertos momentos por que estas carreteras se las traen, pero con cabeza y buenos alimentos se circula bien. Paso por Baqueira, paraiso invernal de bastantes pijos españoles y extranjeros y que ahora en verano esta desolado y mas triste todavia con esta lluvia. Fue una pena rodar lloviendo por el port de la Bonaigua por que no lo pude disfrutar como se merece.
A esas horas ya estaba quemadisimo de la moto y uno ya no sabe ni lo que hace asi que lo mejor es parar y buscar alojamiento. Pregunto en Llavorsi y no hay nada que hacer, pero me indican que en el siguiente pueblo hay un albergue, efectivamente una vez mas tengo suerte, encuentro sin problemas el albergue Les Estades el el pueblo de Rialp a solo cinco Km de Sort, que mas que un albergue es todo un complejo de deportes de aventura para chavales, creo recordar que fueron unos 20 euros con desayuno.
Paisaje en el valle d Aran
El albergue esta cojonudo, es nuevo, grande y todo de madera. Ocupo una habitacion con tres literas para mi solo ademas con tele y todo. Sin perder mucho tiempo vuelvo a pillar a la Anselma y tiro para Sort. Mi primera faena una vez alli es comprar loteria en la famosa Bruixa d or y cargo con unos decimos para Navidad, la segunda faena es echar una buena cerveza en un bar donde converso un rato con unos parroquianos que me cuentan algunas peliculillas sobre los caminos de antiguos contrabandistas para ir y volver a Andorra y de paso me aconsejan un buen restaurante para cenar.
Algun punto del trayecto
El pueblo de Sort me gusta, hay ambiente, tiene su historia y es el centro turistico indiscutible de los deportes de aventura en esa zona, la gente con la que hable me parecio muy amable, di un paseo y subi a las ruinas del castillo con intencion de hacer tiempo para cenar y me dirigi al restaurante Can Josep, que es al que me enviaron los del bar de antes, el cual recomiendo a voces, si pasais por alli id de cabeza, el trato es bueno, aunque la camarera que me atendio a mi no estaba en su mejor dia, los platos son sabrosos y enormes, incluso podriamos decir desproporcionados para un menu de 12 pavos.
Mientras cenaba se lio a llover, habia dejado el casco enganchado en la moto y al quedarse boca arriba se me lleno de agua. La vuelta a Rialp la pase lloviendo, aunque no demasiado. Cuando entro en mi habitacion me doy cuenta que justo debajo de mi balcon hay como una terracita donde unos adolescentes franceses arman todo el escandalo que les da la gana, dando gritos y con la musica a toda ostia, era algo demencial, los monitores les echaban la bronca a cada rato pero ellos dale que dale al musicon, casi seguro que en Francia ni se cantean, pero claro estan de vacaciones en España y eso no pasa todos los dias, sinceramente a mi no me molestaron demasiado y aunque lo hubiesen echo me tendria que joder, los chavales son chavales y deben de armarla yo tambien lo hice en su dia, por cierto la musica electronica que sonaba era buenisima, nunca habia oido ese estilo y ese ritmazo, reconozco que me gustaba aunque yo sea un aficionado al rock principalmente.
vista de Sort
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